Confesiones, de Paul Kingsnorth

Confesiones... en la Sierra del Camorro estos días de septiembre.

El pesimismo recorre el libro. Una y otra vez Paul Kingsnorth nos recuerda la “extracción de recursos, agotamiento de suelos, uso de combustibles fósiles, aumento de la población y destrucción masiva de ecosistemas”. Kingsnorth fue durante muchos años un ecologista militante hasta que, según cuenta, se dio cuenta que no había forma de luchar contra la maquinaria de destrucción puesta en marcha por nuestra especie, desde que perfeccionó las herramientas de caza y exponencialmente acelerada en los últimos dos siglos con la revolución industrial y tecnológica.

Es tal el tamaño de la humanidad, y su impulso de crecimiento necesario solo para seguir funcionando que es imparable su impacto medioambiental por muchas luchas que emprendan los activistas. Esta irreversible y devastadora realidad le lleva a pensar que el ecologismo no sirve para salvar la Tierra, planteando que la la lucha de los conservacionistas ha caído en un utilitarismo que no soluciona ya nada. “Si crees que el activismo tradicional de manifestaciones y campañas va a funcionar hoy donde no funcionó ayer estarás perdiendo el tiempo”.

¿Qué podemos hacer? El autor, que vive en el campo irlandés, plantea cinco puntos: Retirarse, conservar la vida no humana, ensuciarse las manos, encontrar el valor de la naturaleza que va más allá de la utilidad y construir un refugio. Es una actitud que denomina 'ecología oscura', porque “nada de ello va a salvar el mundo, pero es que no hay salvación posible del mundo”.

Esta idea recorre el libro. Realmente no encuentro argumentos contrarios, coincido en muchas cuestiones con el autor, aunque creo que la movilización debe continuar. Coincido con Paul Kingsnorth en que nuestro modo de vivir responde al de una especie invasora que ha roto el equilibrio y que esto al planeta no le importa, seguirá girando, nuestra situación abocará en una extinción, una extinción más.

'Confesiones de un ecologista en rehabilitación' está editado por Errata Naturae con traducción de David Muñoz Mateos. Es una recopilación de ensayos que abordan este 'ecocidio' y su propuesta de vivir de una manera más poética y filosófica, de volver a la guadaña cuando cortamos hierba frente a la apabullante tecnología y todas sus maquinitas.

Blechnum spicant 6 agosto 2017 montes de Pagoeta